CUIDADO CON LAS ESTAFAS CON CRIPTOMONEDAS FALSAS

 


Las criptomonedas han sido comúnmente asociadas con riquezas. Muchas personas piensan que se trata de un método fácil y novedoso para hacer una montaña de dinero en poco tiempo, aunque eso está más bien lejos de la realidad. Las criptomonedas no suelen ser un método para hacer dinero, sino que ellas mismas son el dinero.

Sin embargo, estafadores de todo el mundo han aprovechado ese error común para prometer ganancias irreales a todo aquel que “invierta” en sus plataformas, sistemas o tokens mal hechos. Es así como lograron recaudar, solo durante 2019, al menos 4.000 millones de dólares entre Ofertas Iniciales de Moneda (ICO) fraudulentas, phishing, inversiones falsas y, sobre todo, esquemas piramidales.

  Claro que, a lo largo de los años, ha habido muchas más cripto-estafas (scams) de todo tipo. Siempre tienen más éxito unas que otras, pero existen estafadores que han logrado hacer golpes realmente millonarios, billonarios incluso. A continuación, BeInCrypto te trae las cripto-estafas más grandes de la historia hasta 2020.

Milton Group

Un día te puedes topar en Facebook —o cualquier otra red social— con un clásico anuncio que, misteriosamente, promete multiplicar para ti una inversión muy pequeña durante muy pocos días. Deberás preguntar cómo o solicitar más información. Lo siguiente que podría sucederte es que te pidan tu número telefónico y empiecen a inundarte con llamadas para convencerte de esa mágica inversión con criptomonedas.

La empresa que te contacta hace trading y te jura que mientras más inviertas, más ganarás. Quizás hasta te animas a probar su plataforma con poco y ves en pantalla que, en efecto, tu inversión se multiplica. Eso entusiasmaría a cualquiera, así que inviertes más y más… hasta que descubres que no es posible retirar las presuntas ganancias. Ni tampoco nada de lo que invertiste.

He aquí las vivencias de las víctimas del infame Milton Group, el cual también opera bajo los nombres de Cryptobase, CryptoMB y VetoroBanc. Tras bambalinas, lo que ocurre es que un grupo de teleoperadores multilingües se reúnen en alguna oficina de Ucrania, Albania, Georgia o Macedonia del Norte a seguir pautas establecidas para estafar al mayor número posible de personas incautas. A cambio de su “trabajo” reciben jugosas comisiones.

Se calcula que, solo durante 2019 y desde el Call Center de Kiev (Ucrania), el Milton Group logró estafar unos 71.5 millones de dólares. Considerando que la empresa tiene tres años en funcionamiento y de suponer que hicieron cantidades similares en años anteriores, el total asciende a 214.5 millones de dólares. Eso, sin contar las cifras alcanzadas por los otros Call Centers; así que las pérdidas aún no pueden ser calculadas con exactitud.

La investigación policial hacia el Milton Group continúa, así como la búsqueda de los culpables.

Mining Max

Invertir en máquinas para la minería de criptomonedas suena tan tentador como complicado. Debido a ello, suena maravillosa la idea de solo poner el dinero mientras un experto se ocupa del manejo y mantenimiento de las máquinas y del software, para que al final puedas ganar el mayor porcentaje posible de la misma minería.

A ese procedimiento de invertir en mineros que son manejados por empresas expertas en la materia se le conoce como minería en la nube. Existen varias plataformas dedicadas a ello, donde cada usuario puede escoger un plan a diferente costo. Por supuesto, siempre existe el riesgo de que la parte de los presuntos expertos desaparezca con el dinero o se quede con la mayoría.

Tal fue el caso de Mining Max, una compañía con sede en Estados Unidos y granjas de minería en Corea del Sur. En sus inicios alrededor de 2016, se presentaba como una plataforma de minería de altcoins en la nube y prometía retornos mensuales a todos sus inversionistas. Según rezaba la página entonces:

“Mining Max no vende sus propias monedas y no trata con monedas que no se comercializan en Exchange Center. Mining Max es una empresa que produce monedas de cadena de bloques con mayor valor en el mercado actual. Mining Max es una compañía minera profesional que brinda servicio de gestión de envíos de máquinas mineras propiedad de miembros individuales. La gran granja minera de Mining Max maximiza la capacidad de margen de beneficio de las máquinas mineras individuales con bajas cargas eléctricas”

Posteriormente, se especializaron en la minería de Ethereum. O eso se creía, pues en diciembre de 2017 las autoridades coreanas descubrieron el fraude y lo dejaron en evidencia. [Yonhap News] Los administradores de Mining Max recaudaron alrededor de 250 millones de dólares por parte de unos 18.000 inversionistas provenientes de 54 países, incluyendo a Estados Unidos, Japón, China y la propia Corea del Sur.

Se cree que solo 80 millones fueron invertidos en máquinas mineras, mientras que 110 millones acabaron en cuentas bancarias de paraísos fiscales. El resto se usó para pagar a los inversionistas mayores, quienes, a su vez, recibían dinero de los niveles más bajos de usuarios, en lo que se convirtió en un esquema piramidal.

A la fecha, el sitio de Mining Max fue dado de baja. Pero es necesario estar alerta, pues en su lugar tenemos ahora a BTC Mining Max, una sospechosa plataforma de inversión en empresas blockchain.

Modern Tech (Pincoin y iFan)

Esta compañía se presentó en su momento en Vietnam como la representante de dos Ofertas Iniciales de Moneda (ICO), donde se venderían los tokens Pincoin y iFan. El primero se ofrecía como una oportunidad de inversión con retornos mensuales (e inexplicables) de hasta 40%; mientras que el segundo prometía ser el combustible de una nueva red social para artistas.

 

Con esta fachada, Modern Tech se estructuró como un esquema piramidal donde los mayores y más antiguos inversionistas eran los más beneficiados, ya que los nuevos eran los que pagaban sus intereses. [Vietnam News] Para poder unirse a la plataforma, se solicitaba a cada nuevo integrante “invertir” un mínimo de 1.000 dólares en los tokens mencionados; los cuales, en realidad, nunca valieron tanto.

Para 2018, ninguna de las ganancias prometidas estaba siendo ya pagada. Modern Tech eliminó todas sus redes sociales y nunca apareció en sus presuntas oficinas. Los inversionistas defraudados no pudieron hacer más que ir a protestar frente a la dirección fantasma y denunciar el caso ante las autoridades: se habían perdido 666 millones de dólares por parte de unas 32.000 personas. Aún los culpables no han sido atrapados.

BitClub Network

Este es otro caso fraudulento de minería en la nube, aunque sin duda más grave que Mining Max. La promesa, sin embargo, resulta muy parecida:

“Sin tarifas continuas y soporte las 24 horas. Una vez que te unes a BitClub Network, estarás dentro por 1.000 días. No hay tarifas adicionales para apoyar la minería o para actualizar equipos. Puedes elegir qué porcentaje de tus ingresos mineros se usará para comprar acciones adicionales del grupo y cuánto se pagará cada día”

Desde 2014, se ofrecen allí planes que van de los 50 a los 100.000 dólares a cambio de supuestas ganancias entre el 5 y el 12% de la inversión. Curiosamente, el último plan se puede comprar desde 10.000 dólares para conseguir las mismas ganancias.

En diciembre de 2019, las autoridades estadounidenses finalmente intervinieron en la plataforma, que se reveló como nada más que un esquema piramidal, donde los nuevos inversionistas pagaban a los antiguos. Nunca hubo actividad minera como tal y tres de los promotores fueron arrestados. Dos más aún están en búsqueda y captura.

Matthew Brent Goettsche, de 37 años, fue uno de los arrestados en Florida. Se atrevió a declarar abiertamente que el objetivo de BitClub Network eran inversores “estúpidos”, a quienes solían referirse como “ovejas”. Según sus palabras, estaban “construyendo todo este modelo sobre las espaldas de idiotas”.

Por desgracia, la página de BitClub continúa en línea. Eso pese a que ya fueron robados unos 722 millones de dólares gracias a ella.

PlusToken

Se puede decir que esta infame plataforma fue la gran cripto-estafa protagonista de 2019. De orígenes asiáticos, con fuerte presencia en China, Corea del Sur y Japón, resulta muy similar a la vietnamita Modern Tech. La principal oferta de este sistema era el token PLUS, el cual, presuntamente, sería capaz de retornar a los inversionistas entre un 9 y un 20% mensual.

Quizás una de las razones de su éxito se basó en que, en lugar de llevar a cabo su publicidad a través de medios electrónicos, la mayor parte se dio mediante reuniones y eventos que les permitieron hablar con los potenciales inversionistas cara a cara. De esa manera pudieron darse a la tarea de convencerlos tanto en grupo como de forma individual. Asimismo, ofrecían su “inversión” a través de chats y llegaron a distribuir publicidad física en lugares públicos como supermercados.

Se explicaba que el alto porcentaje de ganancias supuestamente provenía de trading de criptomonedas, minería y referidos. En realidad, PlusToken siempre fue un esquema piramidal sin ningún producto, donde solo los nuevos integrantes podían inyectar dinero fresco que se iría directo a pagar a los inversionistas más antiguos o directamente a los administradores.

A finales de junio de 2019, los usuarios comenzaron a tener problemas para el retiro de sus fondos y los administradores culparon a los supuestos mineros. Poco después, no se molestaron en dar más excusas y desaparecieron con alrededor de 3 mil millones de dólares por parte de más de 3 millones de víctimas. Gran parte de lo estafado fueron cantidades en criptomonedas que aún rondan por la red: Bitcoin, Ethereum, EOS y OmiseGo. Y la transacción final de su parte trajo la nota de “Lo siento, tenemos que correr”.

La empresa de trazabilidad en la blockchain Chainalysis llegó a proveer evidencia que señala como culpables de la caída en el precio que tuvo BTC el año pasado a estos estafadores y su gran volumen de intercambio OTC en exchanges como Huobi. Cuando menos, seis de los miembros del equipo fueron arrestados. [Odaily]

OneCoin

Esta es quizás la reina de todas las cripto-estafas hasta la fecha. Se trata de un esquema piramidal de larga data y a nivel global, que ha tenido fuerte presencia en el mundo hispano. Según explican ellos mismos, OneCoin es una criptomoneda con una cadena de bloques privada y una plataforma de aprendizaje sobre el criptomundo. Las firmas OneLife, OneAcademy y OneWorldFundation son parte del mismo esquema.

Ahora mismo, mediante OneLife y OneAcademy se ofrecen varios “paquetes educativos” que van desde los 110 hasta los 55.555 dólares. Por su parte, OneWorldFundation se presenta como una organización caritativa para niños que acepta donaciones en OneCoins, PayPal, transferencia bancaria y tarjetas de débito y crédito.

En años anteriores, en estos presuntos paquetes educativos —con material plagiado de varias fuentes— incluían tokens que supuestamente podían utilizarse para “minar” onecoins, cuando la minería ni siquiera funciona de esa manera. Además, los usuarios recibían recompensas en estos tokens por traer referidos a la plataforma.

Estos “onecoins” nunca estuvieron listados en ninguna exchange y la única forma de cambiarlos a dinero fíat era en el OneCoin Exchange, un mercado interno solo para miembros. Claro esto fue hasta 2017, cuando el exchange cerró sin previo aviso.

 

En el mismo año desapareció sin dejar rastro Ruja Ignatova, la líder de todo el esquema, tras enfrentar varias denuncias en varios países desde 2016. Su hermano, Konstantin Ignatov, toma el mando y es entonces cuando se promete el lanzamiento de una ICO de OneCoin.

Por fortuna, Ignatov fue arrestado en marzo de 2019 en Los Angeles. [BBC] Por desgracia, Ignatova sigue desaparecida y con ella gran parte de unos 4.000 millones de dólares recaudados a nivel global en numerosos países. Sin embargo, otras fuentes hablan de hasta 19.4 mil millones de dólares desaparecidos por culpa de este esquema. [Hackernoon]

Las páginas y redes sociales de OneLife continúan en funcionamiento, así que conviene evitarlas.

Extra: BitConnect

Se puede decir que el caso de BitConnect (BCC) fue un tanto distinto al de otras cripto-estafas, pues, de hecho, se trató en su momento de una criptomoneda descentralizada. Y todas las criptomonedas descentralizadas basan su valor mayormente en la confianza, por lo que el BCC logró escalar muy alto en la lista de criptomonedas por capitalización de mercado a partir de su lanzamiento en 2016.

Su oferta principal era una plataforma de préstamos en BCC donde se podría conseguir hasta un 40% de ganancias por los fondos prestados. Asimismo, se podía ganar hasta 1% al día solo por tenencias, más otro porcentaje por cada referido que se incluyera al sistema. En una época donde el cripto-mercado era aún más influenciable que ahora, lleno de inversionistas inexpertos y entusiastas, lo que claramente siempre fue un esquema piramidal escondido tras una moneda digital logró alcanzar un éxito arrollador.

El precio por token llegó hasta un máximo de 476 dólares, mientras que su capitalización superó los 2.100 millones de dólares para enero de 2018. Pero ese solo sería el principio del fin.

A comienzos de ese mismo mes, el Texas State Securities Board emitió una orden de cierre para BitConnect, alegando que solo se trataba de un esquema piramidal y que estaba engañando a sus inversionistas. No muchos días después, el 17 de enero de 2018, el equipo de BitConnect (que se mantenía en el anonimato) decidió cerrar sin más su plataforma de préstamos y el precio del token se vino abajo en picada.

Fue un “sálvese quien pueda”: todos los usuarios de la criptomoneda comenzaron a venderla en masa para evitar más pérdidas, así que es difícil saber cuánto se perdió realmente debido a este esquema. No fue sino hasta el 10 de septiembre de 2018 que la última exchange que tenía disponible a BCC para el intercambio (Trade Satoshi) lo retiró en definitiva de su plataforma.

Eso y, por desgracia, una demanda colectiva fallida en contra de los administradores de la plataforma.

Señales de alerta

Siempre podemos luchar en contra de las estafas, pues estas solo se tratan de engaños hacia los menos conocedores. Es necesario entonces educarse lo mejor posible acerca del criptomundo y tener muy en cuenta varias señales de alerta que todos estos esquemas suelen presentar.

En primera instancia, todos y cada uno de ellos solicitan alguna “inversión” y nunca suelen advertir sobre los riesgos de pérdida. Todas las inversiones tienen algún grado de riesgo, ninguna está exenta. Por ello, si alguien menciona que tu inversión será 100% libre de riesgo y con pagos asegurados, lo más seguro es que su intención sea realizar algún tipo de estafa.

Otro factor esencial a considerar es el funcionamiento de esa plataforma. ¿De dónde extrae su dinero? ¿Puede probar que lo extrae de donde dice? Los retiros también forman parte de ello. Si en lugar de tus fondos al intentar retirar consigues “fallos técnicos” durante un tiempo muy extendido, solicitudes de “impuestos” o cualquier otra excusa, puedes estar seguro de que se trata de un actor fraudulento.

También es necesario fijarse en el equipo que maneja el sistema. ¿Se muestra en la página oficial? ¿Se podría comprobar que son personales reales? Y si lo son, ¿tienen alguna clase de antecedente penal?

La investigación y la educación son clave para evitar estafas. No todo lo que brilla es oro.

 

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